En los últimos meses ha proliferado el tema del Insurtech, un término surgido de la unión de dos palabras en inglés, Insurance (seguro) y Technology (tecnología). Insurtech es, para decirlo brevemente, un sector que reúne tanto a compañías de seguros, empresas de tecnología y empresas emergentes, o startups, que se manejan con nuevas tecnologías para crear nuevas alternativas en la oferta del sector de los seguros.
Su nacimiento se ha derivado de la mentalidad tecnológica del milenial, generación que ha mostrado una pérdida del concepto de pertenencia; la necesidad de asegurar nuevos valores que son promovidos por el internet de las cosas, donde billones de objetos podrían ser rastreados; así como por la economía colaborativa, una interacción acelerada por los medios digitales para satisfacer necesidades reales o potenciales entre dos o más individuos.
Bajo esta perspectiva, y dado que las compañías tradicionales de seguros han visto con preocupación cómo nuevas empresas con un alto ingrediente de tecnología y estructuras de costos ligeros están irrumpiendo en su mercado, se empieza a gestar una adaptación de las aseguradoras tradicionales, para aprovechar el potencial del Big Data y otras tecnologías.
Compañías como Axa y Mapfre ya han dado los primeros pasos, ofreciendo seguros más relacionados con un cliente que se interesa en proteger el estilo de vida antes que sus propiedades. Un ejemplo podría ser un servicio de pago que se rige por el uso, en cantidad o calidad, al conocer con precisión cuánto y cómo conduce un cliente su automóvil.
