Antes de comenzar con una guía básica para elegir tu tarjeta de crédito, toma en cuenta que ésta no es una extensión de tu ingreso. Considera que es un préstamo que tienes que pagar, con los respectivos intereses que, por cierto, son bastante altos.
Sin embargo, las tarjetas de crédito, utilizadas con responsabilidad, son un instrumento financiero muy útil, ya que te pueden servir para administrarte mejor y también para utilizar el crédito que te ofrecen, siempre y cuando no te coman los intereses.
Algunas ventajas de la tarjeta de crédito pueden ser:
- pagar en un sinnúmero de establecimientos afiliados,
- hacer compras vía internet o por teléfono,
- realizar reservaciones en hoteles,
- disponer de efectivo en cajeros automáticos,
- pagar nuestros servicios como teléfono celular, servicios de cable, entre otros
- y comenzar un historial crediticio que puede servirte para obtener otros créditos como el hipotecario, por ejemplo
Antes de obtener una tarjeta de crédito toma en cuenta:
- tu estilo de vida
- tus ingresos
- tus hábitos de consumo
- el CAT
- tu patrón de pago
- tu historial crediticio
En el amplio abanico de tarjetas de crédito que ofrece el mercado hay tarjetas para tu primera vez, si buscas iniciar un historial crediticio, si eres estudiante, o si eres viajero frecuente (y buscas acumular millas, por ejemplo), empresario… Hay tarjetas que te dan recompensas (a mayor costo) o tarjetas sin beneficios (con menores costos). Nos referimos aque el mercado hoy brinda tarjetas paa cada estilo de vida.
Tus ingresos no sólo determinarán tu capacidad de pago, también son un factor a tomar en cuenta cuando la institución financiera establezca tu límite de crédito.
¿Cómo se determina el límite de crédito de tu tarjeta?
Está determinado por tu nivel de ingresos, tu historial crediticio; es decir si ya has utilizado anteriormente otro tipo de crédito y si has pagado puntualmente así como si cuentas con más tarjetas de crédito.
Sujeto de crédito: La forma en la que administras tu tarjeta de crédito, un financiamiento para tu auto o bien un préstamo personal habla mucho de ti y de la forma en la que manejas tus finanzas personales. Esto a su vez le aporta datos a los bancos para crear un perfil al momento de otorgarte un crédito hipotecario o de otro tipo: pagas tus deudas, gastas menos de lo que ganas, pagas tus cuentas.
Para efectos de no perder el control de tus deudas, lo aconsejable es que las líneas de crédito de tus tarjetas (en suma) sean cuando muchocuatro veces tu ingreso mensual.
Asimismo, serás sujeto de crédito según la forma en la que administras tu tarjeta de crédito, un financiamiento para tu auto o bien un préstamos personal. Ello habla mucho de ti y de la forma en la que manejas tus finanzas personales.
Esto a la vez le aporta datos al banco para crear un perfil al momento de otorgarte un crédito de cualquier tipo, sea bancario, hipotecario, automotriz…
Las instituciones financieras evaluarán si pagas tus deudas, gastas menos de lo que ganas o viceversa y si pagas tus cuentas a tiempo.
Un buen manejo de tu TDC es una excelente carta de recomendación en este aspecto.
NO EXISTE LA MEJOR TARJETA DE CRÉDITO, ÉSTA SERÁ LA MÁS ADECUADA PARA TI SEGÚN CUBRA TUS REQUERIMIENTOS.
¿Qué evaluar de una tarjeta de crédito?
Para elegir lo más conveniente para ti, lo mejor es conocer y comparar entre varias opciones las siguientes cuotas:
- Comisión por apertura
- Comisión por anualidad
- Comisión por reposición de tarjeta
- Comisión por no usar la tarjeta (las hay)
- Comisión por aclaración improcedente
- Costo por intento de sobregiro
- CAT (Costo Anual Total)
El Costo Anual Total (CAT) es un indicador que mide en términos porcentuales qué tan caro es un crédito, con el cual es posible comparar el costo financiero entre otros créditos. Es decir, es el precio total de un crédito, expresado en porcentaje anual y su valor es informativo.
El CAT incorpora todos los elementos que determinan el costo de un crédito:
- tasa de interés
- comisiones
- primas de seguros que el cliente debe pagar de conformidad a su contrato de crédito
- garantía exigida
- periodicidad o frecuencia de pago
- No incluye IVA.
TOMA EN CUENTA QUE NO INCLUYE EL IVA
Entre mayor sea el CAT, el costo de financiarte con ese crédito va a ser más caro y viceversa.
Consulta la tasa de interés que vas a pagar por pedir dinero prestado, se expresa en un porcentaje por un periodo determinado. Debes fijarte siempre en qué términos está expresada la tasa de interés ya que puede ser anual, mensual, semanal y hasta diaria.
Las comisiones son cobros distintos a la tasa de interés, que tienen el propósito de cubrir los costos directos y los gastos administrativos relacionados con el crédito. Algunas de ellas pueden ser: por apertura de crédito, disposición del crédito, gastos de cobranza, entre otras.
De las múltiples opciones que existen en el mercado, yo las clasifico en las gordas y las flacas. Las gordas son las que te ofrecen puntos, millas, promociones, sorteos… es decir una serie de valores agregados. Pero no son gratis. Estas tarjetas te cobran una tasa de interés muy alta por lo que si necesitas financiamiento acabarás pagando mucho dinero.
Las flacas son tarjetas que no te dan valores agregados, o lo hacen de manera muy limitada, pero te cobran una tasa que llega a ser de la mitad o menos, que las que cobran las gordas.
Lo ideal es que tengas la parejita: aprovecha las ventajas de la gorda utilizándola como tarjeta de servicio, es decir, tratando de pagar el total de tus consumos todos los meses. Ahora bien, ¿requieres crédito? Ni hablar, usa la falca, ya que así pagarás muchísimos menos intereses.
Para elegir la más adecuada para ti, compara toda esta información y después elige la que te conviene. Yo te recomiendo que tengas máximo dos tarjetas de crédito y si acaso una departamental.
Finalmente antes de firmar lee tu contrato. Aclara cualquier duda con el asesor y recuerda que el banco te debe entregar un folleto explicativo junto con tu contrato a la entrega del plástico.
Usa el crédito para crear patrimonio, por ello se debe utilizar con responsabilidad. Sin embargo, si no lo usas de forma adecuada, puede convertirse en un problema que afecte tu calidad de vida.