Actualmente en México alrededor del 70% de los mexicanos no presenta ningún tipo de interés en relacionarse con temas como ahorro, inversiones, créditos, fondos para el retiro y otros, lo que representa un riesgo ya que muchas de estas personas se ven obligados a utilizar métodos informales de ahorro que ponen en riesgo su patrimonio.

Si hablamos de jóvenes, las cifras son poco alentadoras, ya que entre la población de 15 y 19 años no hay cultura del ahorro formal, no se lleva un control sobre sus finanzas e incluso muchos de ellos no tienen una cuenta de ahorro para el retiro o desconocen sobre el tema.

Stori, se ha enfocado en promover la inclusión financiera en México y América Latina para ofrecer opciones a clientes desatendidos, por lo que sabe que, más allá de ser un lujo, una tarjeta de crédito representa la posibilidad de acceder a bienes y servicios, además de ser una herramienta que impulsa el desarrollo de las economías.

Aunque la edad mínima para poder acceder a una tarjeta de crédito es de 18 años, muchas personas llegan a edades más avanzadas sin contar con una por desinformación, miedo o simplemente porque no lo ven necesario.

Manuel Enrique, cliente de Stori cuenta su experiencia: “Soy estudiante de posgrado viviendo en el extranjero ya casi 5 años, por esa razón no he tenido crédito en México, ya que no tengo nómina, historial ni nada. Por eso siempre me rechazaban”.

Lo cierto es que, tener una tarjeta de crédito siendo joven es una gran idea, ya que es una oportunidad para empezar a aprender a manejar nuestro dinero y administrarlo mejor y nos permite generar un historial con varios años de experiencia.

Además, con un buen manejo, eventualmente nos va dando más beneficios como líneas de crédito más amplias o aprobación de créditos con los cuales en el futuro podremos adquirir bienes como autos o casas.

Sin embargo, a diferencia del manejo de una tarjeta de débito, con la de crédito es necesario aprender a controlar los gastos y planificarlos. Tener una tarjeta de crédito, no necesariamente significa tener más dinero para gastar, sino una oportunidad para administrarse mejor, ya que al final, el dinero que sea gastado tendrá que devolverse así que lo mejor es aprender a manejar adecuadamente una tarjeta de crédito en lugar de evitarla.

Antes de sacar tu primera tarjeta de crédito, Stori recomienda lo siguiente:

  • Solicitar una tarjeta de crédito es fácil, pero es necesario que revisar varias opciones antes de tomar una decisión
  • Por lo general para acceder a una tarjeta de crédito es necesario primero contar con una tarjeta de débito
  • Al tener la tarjeta, es necesario tener claro el monto de la línea de crédito 
  • Siempre es necesario evitar llegar al límite, ya que menudo la tarjeta de crédito ayuda también a hacer frente a emergencias
  • Antes de empezar a usar la tarjeta es necesario definir qué pagos se realizará con ella y cuáles es mejor pagarlos de contado
  • Un buen ejercicio es anotar los pagos que se hicieron con la tarjeta para tenerlos presentes y llevar un balance
  • Es importante paga a tiempo el monto indicado cada mes, de ser posible más del mínimo 
  • Hay que considerar que los retrasos o pagos incompletos van afectando en tu historial