Cada vez más vemos que el cajero automático puede ser una trampa para caer en un préstamo o para becar a un niño. Por ello hay que estar muy atentos y leer todos los cuadros de diálogo que nos aparecen.
Existen instituciones bancarias que ofrecen créditos a sus clientes al momento de realizar una operación en cajeros automáticos y en algunos casos, oprimir el botón “Aceptar” , sólo implica una pre autorización del crédito, para luego invitarnos a formalizar su contratación en una sucursal. Sin embargo, en otros bancos una vez que das aceptar se deposita de inmediato en tu cuenta bancaria, lo cual significa que acabas de adquirir una deuda con el banco y afectará tus finanzas personales si no lo habías planeado.
Considera lo siguiente entonces:
- Pon atención al realizar alguna operación en el cajero automático, ya que una distracción podría provocar que autorices operaciones que no desees realizar.
- Si por error autorizante algún crédito por este medio, no dispongas de él y comunícate inmediatamente con tu banco para hacer la cancelación y evitar cargos adicionales.
- Si es tu decisión aceptar el crédito por esta vía te sugerimos primero informarte y conocer las condiciones del crédito o bien consultar el Registro de Contratos de Adhesión de la Condusef, donde podrás identificar las características del crédito que deseas contratar.
- Es recomendable contratar directamente en sucursal, ya que podrás aclarar todas las dudas que tengas con un ejecutivo y conocer directamente sus términos y condiciones.
- Antes de contratar no olvides revisar tu presupuesto, ya que esto te permitirá identificar si puedes pagarlo o no.
- Verifica el Costo Anual Total, la tasa de interés, las comisiones y el costo de los seguros, en su caso para que elijas el crédito que se adapte mejor a tus necesidades y a tu capacidad de pago.
- Toma en cuenta que algunas instituciones sólo hacen una pre-autorización del crédito a través del cajero y es necesario acudir a una sucursal para concretar su contratación.
FUENTE: CONDUSEF