Durante su participación en el Foro Nueva Política Tributaria y de Fiscalización en México, la Jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Margarita Ríos-Farjat, resaltó que mantener una alta recaudación y fortaleza institucional se traduce en la disminución de los costos operativos, porque actualmente se captan 54.8 pesos por cada peso invertido en los procesos de recaudación.
Señaló que las instituciones sólidas y cohesionadas contribuyen a generar certidumbre para la actividad económica, lo que redunda en confianza y crecimiento. En este sentido, el SAT es sólido y fuerte, y puede entonces aportar mucho en ese contexto.
A invitación del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, en el marco de los 500 años de fundación de la Vera Cruz, la jefa del SAT aseguró que la autoridad fiscal trabaja para mejorar la recaudación, a fin de lograr un crecimiento económico sin crear nuevos impuestos, basándose en dos pilares fundamentales de la administración actual: la austeridad y el combate a la evasión.
Agregó que se debe continuar impulsando el uso de las tecnologías para afianzar la cercanía de las instituciones con los ciudadanos; un ejemplo de ello es el Buzón Tributario, herramienta que 5.3 millones de contribuyentes ya utilizan como medio de contacto con la autoridad fiscal.
Por su parte, el gobernador García Jiménez destacó que son necesarias más acciones que permitan un incremento a la recaudación, tanto en el ámbito estatal como en el federal y que la mejor forma de promoverla es con el buen uso de los impuestos para hacerlos productivos; además, combatiendo frontalmente la corrupción y reactivando la economía de la entidad. Señaló que ha estado en conversaciones con la Jefa del SAT a fin de solucionar, dentro del marco del derecho, los problemas fiscales que enfrenta Veracruz.
Con estas acciones, el SAT se compromete a seguir siendo una institución sólida y firme que brinde confianza a los contribuyentes para colaborar en la Cuarta Transformación del país, y a mantenerse atenta, de manera constante e inteligente, respecto a las necesidades de la sociedad y de las instituciones.