Aunque nos abruma el confinamiento y los niños muy probablemente estén aburridos estos días, hoy es Día del Niño en nuestro país y algo hay que hacer para celebrarlos. Pero también hay que recordarles que no todo es regalos y gastos; por ello hay que saber cuándo hablar de dinero con los niños y cómo hacerlo.

Borja Quicios, psicólogo educativo, brinda algunas recomendaciones: 

Desde que son pequeños es recomendable hablar de dinero con los niños, así aprenderán oportunamente a administrarse y ahorrar para valorarlo desde temprano. Esto evitará que se formen mitos y prejuicios respecto al dinero y las finanzas, que aún en estos días sigue habiendo entre la población.

Hablar de dinero desde que son pequeños nos ayudará a que tengan bases sólidas en cuanto a lo que será su futura gestión del dinero. Por supuesto, en este proceso se debe ir desde los conceptos más simples hasta los más complejos, según vayan creciendo. La mejor manera de hacerlo es poniéndoles ejemplos y actividades de práctica.

En estos días de cuarentena, especialmente, podemos hacerlo de forma más directa y con tiempo para jugar, al supermercado, el banco o la tienda, por ejemplo.

¿A qué edad debo hablar de dinero y cómo lo hago?

Al respecto, Quicio sugiere qué conceptos puede ir entendiendo el niño según su edad.

Desde los 3 a los 5 años. Los niños aún son muy pequeños para entender conceptos financieros, pero sí pueden ir aprendiendo algunas cosas. Por ejemplo, que el niño se dé cuenta de que no se puede tener todo lo que quiere y que requiere un esfuerzo conseguir las cosas. Gracias a ello, el pequeño irá desarrollando la paciencia que será de gran ayuda a la hora de ahorrar. Además es buen momento para que el niño aprenda a elegir.

Desde los 6 a los 9 años. Esta etapa es buena para que empiecen a ahorrar. De este modo, van a podrán administrar su dinero de manera práctica e irán dándose cuenta del valor que tiene sin necesidad de explicaciones abstractas.

A los 13 años. Será buen momento para que el niño tenga alguna cuenta en el banco y empiece a experimentar con el banco. Esto le ayudará a entender cómo funcionan los productos que ofrecen. Será la manera de ir introduciendo conceptos más complejos y que puedan entenderlos.

Desde los 13 a los 15 años. Es momento para motivarles a que busquen alguna actividad que les haga ingresar su propio dinero. Ayudarlos y guiarlos, pero ya no sólo basta con los regalos que nosotros hagamos.