En línea con las mejores prácticas internacionales, la CONSAR adoptó desde hace algunos años la metodología conocida como “Supervisión Basada en Riesgos” (SBR). Como recomendación de las mejores prácticas en la materia, y para otorgar mayor transparencia a los participantes del SAR y al público en general respecto a los procedimientos que sigue la Comisión para supervisar a las AFORE, es que hoy publica su metodología de supervisión.

La Supervisión Basada en Riesgos es un enfoque de supervisión que se centra en: 1) identificar los riesgos a los que están expuestas las AFORE y sus fondos de inversión y 2) evaluar la manera en que estas entidades gestionan y mitigan dichos riesgos.

La Comisión cuenta con cuatro áreas de supervisión encargadas de realizar la inspección y vigilancia de los procesos que llevan a cabo la AFORE: a) financiera, b) operativa, c) calidad de la información y servicios y d) prevención de Lavado de Dinero. Para la realización de estas labores de supervisión, la CONSAR contaba al cierre del mes de septiembre del 2018 con 319 trabajadores.

La Metodología que hoy se publica, desglosa los distintos pasos que sigue la CONSAR para llevar a cabo su supervisión basada en riesgos. A continuación, un breve resumen:

  1. Primero, para la implementación del enfoque basado en riesgos en las distintas áreas, se requiere en primera instancia, identificar los riesgos presentes en el SAR centrándose en aquellos que podría tener mayor repercusión en el Sistema y que pudieran incidir en los recursos, los derechos y/o la confianza de los afiliados. Cabe señalar que la identificación de un riesgo NO supone que éste se haya materializado en el pasado o vaya a materializarse en el futuro, sino al identificarlo, es posible cuantificarlo y mitigarlo.

    Con base en la experiencia de supervisión de más de 21 años de trabajo de la CONSAR, se identificaron y definieron 18 factores de riesgo en el SAR, clasificados y ordenados en cinco grandes apartados: a) riesgos generales del sistema, b) riesgos financieros, c) riesgos operativos, d) riesgos de servicios e información y e) riesgos de lavado de dinero.

    /cms/uploads/image/file/451538/img1.jpg

  2. Segundo, una vez determinados los 18 principales factores de riesgo existentes en el Sistema, es necesario clasificar cada riesgo en función de su probabilidad de ocurrencia y su nivel de impacto. A ello se le llama “Escenarios de los Factores de Riesgo del SAR”. Son las áreas de supervisión de la CONSAR, con base en su experiencia, las que determinan las calificaciones correspondientes. Esta valoración sirve para priorizar la atención y los recursos de la Comisión en los riesgos que más podrían impactar al sistema de pensiones. Aquí el resultado de dicho ejercicio donde se muestra, por ejemplo, para la CONSAR, el riesgo de mayor probabilidad de ocurrencia y nivel de impacto en el SAR es la “baja suficiencia”, el riesgo de que las pensiones resulten menores a las expectativas de los ahorradores.

    /cms/uploads/image/file/451537/img2.jpg

  3. Tercero, una vez que se cuenta con la Matriz de Riesgos del Sistema, es necesario identificar los procesos y subprocesos que llevan a cabo las AFORE, con la finalidad de detectar aquéllos donde se presenten mayores vulnerabilidades, y relacionarlos con cada uno de los factores de riesgo, es decir, detectar qué riesgos son encontrados en cada una de las actividades que realizan las AFORE.
  4. Cuarto, se identifican los controles y mitigantes que tiene implementadas cada una de las AFORE con la finalidad de minimizar la probabilidad de ocurrencia y/o el impacto de los riesgos identificados.
  5. Quinto, a través de un mapa de color, se ubica a cada una de las Administradoras en éste y se identifica aquellas que se muestran más vulnerables con lo cual la CONSAR puede destinar mayor atención y recursos a corregir los procesos vulnerables de la(s) AFORE. La identificación, la valoración cuantitativa y cualitativa de riesgos y mitigantes, permite a la CONSAR optimizar sus recursos para planear y enfocar la supervisión del SAR en los procesos que podrían presentar mayor riesgo, en función de su probabilidad de materialización y nivel de impacto.

En resumen, la publicación del presente documento pretende abonar a la transparencia del sistema de pensiones mediante información dirigida al público en general y a las AFORE respecto a cuáles son los riesgos que considera la CONSAR como los más significativos del sistema, así como los procesos de supervisión que sigue la Comisión para vigilar dichos riesgos. Por último, con la publicación de este documento, se espera coadyuvar a generar una mayor cultura de riesgos y prevención al interior de las Administradoras y de sus Gobiernos Corporativos.

Consulta aquí la metodología de la” Supervisión Basada e Riesgos”.